22 de junio de 2015

¿Amistad vs Pareja?


Me sugirieron hablar sobre la amistad…y me pregunté: ¿Por qué hablar de un tema tan tratado, debatido, publicado y harto conocido?
Y se me ocurrió enfocarlo desde otro punto de vista, además de que porque es un tema siempre vigente. Uno de esos que no se agota, como el Amor mismo.
Y porque de eso se tratan ambas DE AMOR!!!

Hay miles y miles de definiciones, opiniones, frases y modelos… estereotipos sobre que es o no es una verdadera amistad.

Y yo  quiero en esta entrega, exponer mi pensamiento….y éste será encontrar el paralelismo en las relaciones de parejas y las de amistad.
En mi opinión personal, yo creo firmemente que la amistad es igual a una relación de pareja, pero despojada de lo sensorial.
El resto es idéntico.
Es una relación de amor…
…y por tanto puede ser tan falsa como verdadera, tan eterna como efímera.
Partiendo de esa premisa, desarrollaré mis razones para mostrar las similitudes a las que hice referencia.

La relación de pareja, se inicia con la atracción de las partes. Mayormente, esa atracción proviene de lo externo, de lo puramente físico. Para que esa pareja se constituya como tal, la atracción debe superar esa primera instancia y profundizar las causas que la motivan.
Allí se descubren las analogías, se produce la sensación de correspondencia y se genera un deseo de estar cerca y compartir las vivencias con esa persona en particular.



En la amistad sucede algo muy similar, sin la atracción física, ésta es más profunda. Se establece una conexión invisible pero muy específica, que nos hace saber que esa amiga/o, son un complemento maravilloso para nuestra existencia.
Cuando amamos, queremos vivir todo con ese ser amado, igual sucede con un amigo que se convierte en entrañable.

En la pareja se crean lazos, se genera la confianza, la complicidad, el deseo de su compañía, el apoyo emocional, la contención, compromiso y también….celos!
¿No ocurre acaso lo mismo en la amistad, (celos incluidos)?
Si, celos, porque una amiga/o es un tesoro para quien lo posee, y muchas veces, estamos mal acostumbrados a ser algo posesivos, lo cual, si no excede lo razonable, no sería un problema, de lo contrario, al igual que en las relaciones de pareja, se puede tornar en una diligencia poco sana.



Sin ciertos escenarios,  ni una pareja, ni una amistad podrían subsistir.

ü  Confianza
ü  Sinceridad
ü  Complicidad
ü  Lealtad incondicional
ü  Compromiso
ü  Solidaridad
ü  Cuidado por el otro
ü  Respeto

Estos valores son el motor que manejan el vínculo y garantizan su funcionamiento.
Cuando fallan alguno de los componentes, se desmorona lo creado.
Como en toda relación, hay que cuidar y nutrir constantemente, no perduran aquellas donde uno solo aporta mientras el otro recibe. 

¿A quienes podemos llamar verdaderos amigos?

La diferencia entre AMIGO y conocido es abismal, y creo que todos lo sabemos.
Conocidos son todos los que pasan por nuestras vidas superficialmente, con los cuales podemos compartir ciertas cosas como actividades de cualquier tipo, trabajo, estudio, charlas y salidas… pero eso no es una AMISTAD verdadera.
Los amigos temporales, muchas veces se confunden con amigos verdaderos. Sucede que se generan relaciones intensas de afinidad, confianza y demás, pero duran el tiempo que la circunstancia que los encontró concluya, como las anteriormente mencionadas,  como por ejemplo: Estudio, trabajo, deportes además de cercanía y tantas más.
Pero muchas veces, al cambiar esas circunstancias, las relaciones se diluyen, se van desvaneciendo hasta quedar en el rincón de los recuerdos.







Pueden que a esta altura se pregunten el porqué del título de este tema: “Amistad versus pareja”.

Suceden dos cosas bien puntuales.

Una es que muchas personas creen que no se puede ser amigo (en profundidad) con una pareja. Que no es lo mismo la complicidad que se genera entre amigos en concordancia con la pareja, o que por ser de diferentes sexos (cuando es así), no se entienden como lo harían con alguien del mismo...

Yo creo lo contrario, en mi experiencia, sumada a las interminables charlas con distintas personas, concluyo que solamente hay relaciones de pareja duraderas, cuando además hay entre éstos una buena amistad. Simplemente porque se cumplen todos o la mayoría de los requisitos que mencionamos como ingredientes necesarios para que el vínculo sea fuerte y auténtico.


Los amigos no tienen, tal como en las parejas, que pensar igual para poder construir una gran relación, basta con el respeto y la aceptación. 
La posibilidad de debatir, fijar acuerdos, conciliar, disentir y volver una y otra vez a ajustar los criterios hacen posible que la amistad sea resistente.
La afinidad y el sentimiento pueden surgir entre personas de distinto sexo, clase social, culturas edades o ideologías.
Además no hay una etapa de la vida precisa o determinada para que florezcan dichas relaciones,  tanto en la juventud como en la adultez, las personas pueden encontrar su alma gemela, sea ésta una pareja, o una amistad.


Para la verdadera amistad, no existen tiempos ni distancias, ni siquiera la presencia física es indispensable. Doy fe de ello porque lo vivo en carne propia. Tengo una amistad inquebrantable con al menos tres personas que viven lejos de donde me encuentro, pero nuestro contacto es casi cotidiano, compartimos vivencias, charlas, alegrías y tristezas, pero sobre todas las cosas, cada una está presente en los momentos más difíciles de la otra. Además en esta época de gran tecnología al alcance de todos, no hay distancia que no se acorte, o parezca inexistente. Desde las redes sociales, las llamadas por video cámara, los teléfonos y los mensajes de audio, no hay excusas a la hora de establecer una comunicación fluida.


Eso SI es AMISTAD verdadera, tiene que ver con la INCONDICIONALIDAD!
Una importante diferencia en este caso con los vínculos de pareja es que no se sostienen en la distancia, salvo contadísimas excepciones.

La otra razón es que cuando la amistad se da antes que alguno de los integrantes conforme una relación de pareja, una vez consolidada la última, el nuevo integrante no acepta el estrecho vínculo. Sea o no del mismo sexo.
Mucho más notorio es cuando el amigo previo no pertenece al mismo sexo. Allí aparecen y predominan los celos, en algunos casos hasta romper con esa vieja amistad
Las personas muy posesivas, no suelen aceptar que en vez de compartir todos y cada uno de los momentos con ellas, su pareja lo haga con su amigo/a. y eso concluye con amistades de años. 
Es muy común escuchar a una novia/o, dar a elegir entre sí misma o los “amigos”…de una manera directa o indirecta, esto termina sucediendo, por lo menos en el ochenta por ciento de los casos.
Aquí se abriría otro debate. ¿Era entonces esa una sólida amistad?



¿Quién sabe? Es un tanto complejo desglosar la mente de cada persona que condicionada absolutamente por sus propias circunstancias sus necesidades, sus anhelos todo lo que pone de un lado u otro de su balanza…cosas que finalmente determinan que decisión tomará si se le presenta este tipo de disyuntiva.

Lo que puedo afirmar, es que vi suceder estas cosas a lo largo de mi vida y que aunque parezcan cuestiones retrógradas, siguen ocurriendo.

Claro que nada de lo expuesto es garantía para que la amistad o vínculo sean imperecederos, puede suceder tanto que las diferencias socaven la relación como que se ajusten los moldes de cada uno para sobrellevarla sin problemas.




A continuación, un pequeño resumen de cómo saber si una amistad es VERDADERA.

-Un amigo no es el que comparte fiestas, descontrol y excesos, es el que los regula.

-No es el que llama cuando necesita ser escuchado y no atiende cuando lo necesitamos nosotros.

-No es el que aparece solo para festejar el cumpleaños, es el que lo organiza.

-No es el que regala cosas bonitas, es el que se toma la molestia de hacer o elegir lo que sabe que nos gusta o hace falta.

-No es el que habla de sí mismo por horas como si los problemas fuesen solo su patrimonio, pero no tiene tiempo para compartir los nuestros.

-No es el que llega cuando la mesa está servida, sino el que se queda a lavar los platos.

-No es el que te busca, llama, acompaña y comparte todo mientras no tiene una pareja y desaparece como por arte de magia al encontrarla. Es el que cuando consigue su par, salen juntos aunque sean tres, te llama y busca  y comparte tanto o más que antes porque no olvida que fuiste quien lo apoyó mientras estuvo solo/a.

-No es el que está en las horas más felices, es el que no se va en las más tristes.


-No es el que antepone sus planes cuando sabe que su amigo está en una verdadera necesidad.

-No es el que va a la inauguración de tu casa sino el que pone sus brazos para que la levantes.

-No es el que busca halagos por sus logros o habilidades y logros sino el que también estimula al amigo a alcanzar sus metas.

-No es el que te dice mentiras “piadosas” para complacerte,  es el que te tira en la cara tu realidad para que la sopeses con tus criterios.


Tanto el buen amigo como el verdadero amor, son aquellos en los que depositamos plenamente nuestra confianza, no solamente con quienes nos sentimos plenamente identificados sino que además afloran naturalmente los más altos valores, entre ellos la tan preciada LEALTAD.
El amor venga del lugar que venga, trae consigo los mejores deseos para el otro,  por lo tanto no caben sentimientos opuestos a éste.
El aval o la complacencia sin mérito, no provienen del buen querer sino de su opuesto, de la apatía, de aquellos a quienes no les interesan las consecuencias a las que tendrías que enfrentarte si por alguna razón te encontraras desorientado.
Claro que equivocarnos forma parte de nuestro crecimiento personal, se trata de sentido común.
Si perdemos el centro en algún momento de nuestras vidas… ¿qué mejor que el buen amigo/pareja que te ayude a reencontrarlo?
El “no te metas” es una actitud inerte, desprovista de sentimientos verdaderos, aunque nos equivoquemos, siempre que haya buena intención, es mejor involucrarse que mantenerse al margen. (Sin ser invasivo) 
Yo le llamo COMPROMISO. Un consejo dado con amor puede ayudar a reflexionar a quien se encuentra desenfocado. Eso marca una significativa diferencia


Un amigo es un alma gemela, alguien con quien nos sentimos como hablando con nosotros mismos


Los amigos son verdaderos ángeles, seres especiales que están en el momento preciso con la palabra adecuada, con el incondicional amor que hace de las relaciones verdaderas.

 Y éstas son un gran regalo, un privilegio del no todos gozan.

Allí donde exista AMOR VERDADERO no cabrá traición, mentira o adversidad que termine con ellas, si terminan, no habían comenzado...


En conclusión: No hay ganadores en este supuesto enfrentamiento. Tanto en el vínculo de amistad, como en el de pareja, triunfa EL AMOR VERDADERO.

EL ÚNICO QUE NO PERECE.





Hasta la próxima!!!